Hace dos días en Rafi’ah,
nueve árabes fueron asesinados,
ayer seis
fueron muertos en Hebron,
y hoy —sólo dos.
El año pasado
mientras marchábamos
desde la calle Shenkin,
un hombre en motocicleta
nos gritó:
"Muerte a los árabes!"
En la esquina de Labor
frente al mercado de Bezalel,
junto a la carnicería
de Braun,
y en la esquina de Bograshov:
"¡Muerte a los árabes!"
Durante un año entero
este poema estuvo tirado
sobre la acera
a lo largo de la calle King George,
y hoy
lo levanto y compongo
su línea final:
"¡Vida a los árabes!"
Aharon Shabtai
No hay comentarios:
Publicar un comentario